La internacional australiana Sam Kerr, una de las estrellas femeninas del fútbol, fue acusada de ofensa con carácter racista sobre un agente de policía en el Reino Unido, según se informó este lunes desde la policía británica.
Los hechos son antiguos y se remontan al 30 de enero del año pasado en Twickenham, en la periferia suroeste de Londres, precisó un portavoz de la Policía Metropolitana.
Los hechos se habrían producido cuando un agente de policía intervino en respuesta a una disputa sobre la tarifa de una carrera de taxi, prosiguió.
Sam Kerr, de 30 años y jugadora del FC Chelsea, compareció ante un tribunal de Wimbledon el pasado 1 de febrero.
La Federación Australiana de Fútbol indicó en un comunicado estar «al corriente del procedimiento que implica a Sam Kerr en Reino Unido».
«Dado que se trata de un asunto judicial en curso, no podemos aportar otros comentarios en este momento», añadió Football Australia en un comunicado difundido desde Sídney.
Segunda tras la española Aitana Bonmatí por el Balón de Oro 2023, Kerr milita desde la temporada 2019-20 en el Chelsea, donde ha ganado las cuatro últimas ligas de Inglaterra.
Operada de una grave lesión en el ligamento cruzado anterior de una rodilla a comienzos de enero durante una concentración en Marruecos, la delantera de recupera de esa intervención, pero su presencia en lo que resta de temporada y en los Juegos Olímpicos de París está en duda.
Internacional con las ‘Matildas’ desde que contaba con 15 años, Sam Kerr participó en el último Mundial, en el que Australia, coanfitriona junto a Nueva Zelanda, cayó en semifinales ante Inglaterra.
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